La semana pasada, DetonatioN FocusMe (DFM), la organización de deportes electrónicos más destacada de Japón, confirmó que su top laner, Haruki “tol2” Shibata, fue potencialmente amenazado por los entrenadores del equipo.
La revelación se produce después de que tol2 acusó a la organización de intimidación y posteriormente huyó de la casa de juego del equipo el 6 de julio. La organización abordó la situación en un comunicado publicado el 7 de julio.
Fuente: Flickr | Foto por Joe Brady
DFM, luego de realizar entrevistas a los involucrados y verificar los hechos, reconoció las acusaciones de tol2. La organización admitió que dos de sus entrenadores, Kazuta “Kazu” Suzuki y Kyohei “ceros” Yoshida, hizo declaraciones que podrían interpretarse como amenazas. Como consecuencia, tanto Kazu como Ceros fueron inmediatamente destituidos de sus cargos.
La organización se ha comprometido a intensificar sus esfuerzos para mejorar la comunicación interna dentro del equipo. También reconoció que tol2 está lidiando con problemas de salud mental. La declaración agregó,
“La situación con tol2 no ha mejorado lo suficiente, y él está mental y físicamente enfermo”.
Sin embargo, se observó que a partir de mayo de 2023, cuando tol2 tuvo problemas durante el MSI 2023, el equipo no tuvo conocimiento de ningún trastorno.
Mal contrato conduce a multas
DFM se ha comprometido a preparar un sistema de apoyo que atienda no solo a la condición física de los jugadores sino también a su bienestar mental. Este compromiso se produce a la luz de las denuncias de abuso verbal de los entrenadores por parte de tol2, que informó a la alta dirección. En respuesta, tol2 supuestamente fue multado por el CEO de DFM, Nobuyuki Umezaki, y advirtió que podría ser eliminado del equipo.
La organización confirmó que un de hecho, se impuso una multa de 300,000 yenes a tol2, pero no fue por denunciar el abuso. En cambio, fue por incumplir su contrato en junio de 2023 al comunicarse con un tercero. A raíz de esta controversia, DFM planea mantener conversaciones con tol2, otros jugadores, funcionarios de LJL y la gerencia.
La pena también se reducirá, según el comunicado.
Parece que todo el contrato DFM se estableció de tal manera que un jugador no puede buscar apoyo externo en caso de mala gestión o malas prácticas. Al menos no sin estar en incumplimiento de contrato. Esto daría como resultado que la mayoría de los abusos de poder nunca se informen fuera de la organización, una tendencia que vemos con demasiada frecuencia en todos los ámbitos con los contratos de deportes electrónicos.
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